Este 2016 nos trajo una cantidad impresionante de animes, más de 150 para se exactos, entre series y películas tuvimos para elegir cada temporada y en cada una de ellas hubo decepciones y joyas, así que le preguntamos a nuestro staff cuál es el título que más les gustó de este 2016, estas son las respuestas:
Para Sara Elric: Kiznaiver
¿Realmente el compartir el dolor físico nos llevaría a la paz mundial? Esta fue la propuesta del estudio Trigger, con ‘Kiznaiver’, donde involucra el miedo a mostrar las debilidades de cada persona. El drama siempre estará presente, haciendo que nos identifiquemos con alguno de los personajes que sufren el temor a ser rechazados por lo que son. A pesar de que algunos de los protagonistas se les dan más importancia que a otros, eso no evita que seamos testigos de la madurez y desarrollo emocional del que también formamos parte cuando estamos en esa etapa de la vida.
El apartado visual es algo impecable, junto a unas tomas e iluminación perfectas con los que se puede disfrutar mejor.
Para FreudChicken: Sound! Euphonium 2
La segunda temporada complementa extraordinariamente a la primera, uniendo muchos de los cabos sueltos que aquella había dejado. Pudimos conocer más profundamente a personajes secundarios, pero importantes como Haruka y Asuka y creo que deja muy claro que las relaciones humanas y la cotidianidad enmarcan un sinnúmero de vínculos y circunstancias que hacen que valga la pena. En suma, Sound! Euphonium es un anime ‘slice of life’ que describe con gran detalle los vericuetos de la vida de una pequeña parte de una orquesta y es exitosa en esa empresa. Además, el trabajo vocal de Tomoyo Kurosawa como Kumiko es sorprendente por su naturalidad y, de entre lo que vi, sólo le compite Aoi Yuuki como Kayo Hinazuki en ERASED.
Para Rafa de la Mancha: Erased (Boku dake ga inai machi)
Es una serie donde el protagonista, Satoru Fujinuma, es un mangaka fracasado y con actitud apática que trabaja como repartidor de pizzas y posee una habilidad especial, sufre ocasionalmente un tipo de “déjà vu”, un evento donde retrocede unos segundos en el tiempo y al suceder esto, sabe que debe prestar atención a su entorno porque algo malo está por suceder (algún accidente de tránsito, alguien será atropellado, etc.). Su vida “ordinaria” sufre un cambio de 180° cuando ocurre un evento perturbador que le genera mucho estrés y su habilidad lo envía varios años al pasado, donde tratará de atar cabos con unos hechos macabros que ocurrieron en su infancia y que están ligados con su presente.
La serie es un drama-suspenso que siempre te mantiene con la intriga y con el corazón en la mano, la forma tan estresante en que terminaban los episodios me recordó un poco a Parasyte y el hecho de esperar una semana por el siguiente episodio era un martirio. La reacciones y situaciones de los personajes son muy humanas, la relación madre-hijo, el bullying, maltrato infantil intrafamiliar, soledad a edad temprana, solidaridad para ayudar a otros, etc. El villano está muy bien diseñado y conectado con la historia. A mi parecer quedan algunos cabos sueltos, pero no impiden disfrutarla y quedar complacido con la conclusión de la historia. Eso a mí ver la hizo la mejor serie que miré este año.
Para Enormetroll: Amaama to Inazuma (Sweetness and Lightning)
Una serie de corte dramática, con toques de comedia y mucho slice of life, pero no el clásico que se desarrolla en una escuela con alumnos de secundaría siendo el centro de atención.
Tenemos a Kohei Inuzuka, un maestro de preparatoria quien tiene una hija de 5 años llamada Tsumugi, ellos viven juntos en un pequeño departamento y están aprendiendo día a día cómo ser una familia de 2; ya que hace apenas 6 meses La esposa de Kohei y madre de Tsumugi, falleció.
Su día a día va acompañado de comida instantánea y poco tiempo para hacer cosas entre padre e hija. Esto empieza a cambiar, cuando conocen a una de la alumnas de Kohei: Kotori Iida, (una chica a la que le encanta la comida) un día libre cuando salen a pasear durante el Hanabi.
Una serie de situaciones hacen que Kojei y Tsumugi lleguen a un pequeño restaurante, que resulta ser propiedad de la madre de Kotori y en el que Kotori, Kohei y Tsumugi terminan aprendiendo a cocinar, pero además de esto, aprenden que la vida es más que solo hacer una rutina día a día acompañados de comida rápida.
Para Arturo Marín: Flying Witch
Es una historia tranquila que sigue la vida de una bruja recién llegada a casa de sus familiares en un pueblo. Lo interesante de este anime es que la narración de una vida ordinaria en la vida de una bruja. Es un anime que está dirigido a a personas que busquen algo normal y sencillo de entre todas las series de hoy en día. Me agradó ver Flying Witch porque ofreció algo distinto a muchas de las series que he visto últimamente mientras relata las vidas de los personajes y cómo se desenvuelven aspectos cómo la amistad y la familia.
Para Marmotmx: Yuri On Ice!!
Yuri on Ice en un inicio nos presentaba como una serie deportiva con tintes BL, la verdad es que no esperábamos mucho de ella, pero si que nos sorprendió, con cada episodio nos demostró que Yuri on Ice no sería la típica historia yaoi/bl, fue una genial mezcla entre deporte, emoción y drama que cautivó al público en general, al grado que el fenómeno saltó a las redes y varios patinadores la comenzaron a ver y a volverse fans. Mucha gente que nunca pensó en ver una serie protagonizada por una pareja masculina quedó fascinada con la trama. La travesía de Yuri Katsuki por cumplir su sueño de alcanzar a su gran ídolo, el pentacampeón, Victor Nikiforov fue algo que nos cautivó y que se superó semana a semana. Los personajes nos cautivaron, la música nos hizo vibrar, y si bien la animación no fue increíble como en otros animes deportivos, nos emocionó en cada episodio y nos conmovió con su emotivo final que logró crashear a Crunchyroll.