Es de nuestro conocimiento que el tomo de Inuyasha #4 salió ya hace dos meses, sin embargo mi editor insiste que les hable de este maravilloso manga que tanto amo y es a mi parecer una de las grandes obras de Rumiko Takahashi.
El villano aparece
Y es que a partir de este tomo la sombra del villano principal Naraku aparece en las aventuras de Inuyasha, y no lo dejará hasta reunir todos los fragmentos de la Shikon no Tama.
A decir verdad, a Naraku no le gusta involucrarse personalmente en su batalla contra nuestro Hanyou, y nunca lo hará pues ira más allá de lo imposible para evitar cualquier enfrentamiento cara a cara.
Y sus objetivos, que ahora se saben se expanden hasta el nuevo aliado del grupo el monje Miruko, ideando un plan que lo pondrá en peligro y fuera de combate.
La dualidad de la historia
Y quien mejor para hacerle mal que el propio Sesshomaru, quien aún se encuentra tras la poderosa katana de su padre la Tessaiga, tras una dura pelea veremos como Inuyasha llega a una difícil decisión al darse cuenta del peligro que de verdad corren sus compañeros al enfrentarse a tan poderosos Yokais.
Pero que sería de esta increíble fabula feudal sin los sentimientos conflictivos de Kagome por Inuyasha y viceversa, y estos no hacen más que complicarse tras la aparición de Kikyo.
El arte distintivo de Rumiko va mejorando (si es que se puede) paulatinamente tras cada batalla del Hanyou con sus enemigos, con acción mas dinámica y explicita ante las heridas reales de las batallas .
En resumen la historia no hace más que moverse hacia adelante, entre la perfecta combinación de acción y romance.
Dónde conseguirlo:
Este cuarto volúmen de InuYasha, lo puedes conseguir en los distintos puntos Panini ubicados en la república, así como tiendas de autoservicio y en la tienda en línea.
